hoy me pegó el bajón otra vez, no sé por qué. me sentí como si estuviera en el 2010. en julio del año pasado. fue uno de los peores meses. mayo también, pero estaba más en estado de “shock”.

dicen que cuando a una persona le pasan cosas malas pasa por cuatro etapas. se puede decir que yo las pasé, pero en desorden.

1- Negación: mayo, junio.. no podía creer lo que había pasado, era totalmente imposible. sentía que iba a volver a Olavarría y los iba a ver. sabía que no, que estaban muertos, pero tenía esa sensación.

2- Tristeza: nunca estuve más deprimida. me costaba levantarme a la mañana porque me preguntaba “¿para qué?”. ir todos los días al colegio, que me fuera mal, pelearme con mi familia y amigos me hacía mierda. julio, agosto, septiembre. julio fue un mes diferente porque fueron las vacaciones de invierno. estaba aterrada, no quería que llegaran más, porque sabía que íbamos a ir a Olavarría y al fin iba a caer. y así fue. llegué a y me empecé a acordar de cosas.. ir caminando por la calle con él, riéndonos. ir al club, donde lo conocí y ver todo tan triste y vacío. siempre fue una alegría ir al golf, esta vez no lo fue. se veía a la gente tratando de sobrellevar lo que había pasado hacía 2 meses.. muy poco tiempo, sinceramente. yo no pude. no aguanté. exploté. no soportaba estar ahí, me quería ir. me encerraba en mi cuarto, con la luz apagada y escribía, o dormía. no hablaba con nadie, no comía, no sonreía. triste. unos días antes de volver tuve una pelea con mis papás, porque yo quería ir al cementerio y ellos no.. fue una decisión muy difícil de tomar para mí. sentía que si iba me iba a apagar, me iba a caer. pero también sentía que si no iba los estaba decepcionando, y cuando finalmente decidí ir no fuimos.

3- Enojo: septiembre. fue un mes horrible, me peleé con las personas que más quería y podía ver cómo los lastimaba con las cosas que les decía. después de decirlas me arrepentía inmensamente pero no hacía nada, porque mi orgullo no me dejaba. estupidez. vivía enojada, y preguntándome “¿Por qué les pasó esto a ellos?”. lo que más alimentó mi IRA fue enterarme de que el accidente había sido producido por un pibe de 19 años que manejaba un auto por la ruta sin luces. estupidez.

4- Aceptación: todavía estoy atravesando esa etapa. ya acepté que se murieron, no están. ya pasé la parte de no querer creer lo que había pasado pero todavía me duele mucho. ya no lloro a la noche, ni me despierto a las 3 de la mañana por tener pesadillas sobre eso. ya no. no sé si voy a terminar de superarlo, porque no sé si quiera. superar es una forma de olvidar. olvidar el dolor. y esas cosas no hay que olvidarlas, hay que afrontarlas. ¿estupidez?. no sé, es lo que yo pienso. mi forma de ser cambió mucho desde ese día. soy más distante y me importa menos la gente. debería ser al revés. es más, hay muy pocas personas que me importan de verdad. los demás, se pueden ir a la mierda y me va a resbalar. me sorprendo a mí misma con las cosas que digo, yo no era así. pero es la realidad, no me importan.